Promesas de muerte, vida y dolor, en el que supone uno de los mejores capítulos de Juego de Tronos… Y de la historia de la televisión. Además de una nueva demostración de que, sin lugar a dudas, lo mejor de esta serie son sus personajes femeninos. Hoy podemos decir bien alto: «¡ABAJO EL PATRIARCADO!»

Este «lip sync for your life» de casi una hora y media de duración supone uno de los capítulos más caros de la televisión. Y con toda la razón, pues más de 50 días de grabación y 700 extras han hecho falta para poder contar «la larga noche».

Frío, noche, terror y miedo

La larga noche empieza tras reunir a nuestros personajes favoritos en la que parece la última noche del planeta. Las manos de Sam nos llevan por un recorrido para entender todas las posiciones y el cómo vamos a ir viendo morir todo lo que amamos.En un resumen sencillo y fácil, que es lo que queremos, pero con OJO, SPOILERS:

La llegada de Melisandre para hacernos saltar de emoción por la mujer con el mejor tratamiento anti-envejecimiento de la historia y una de las mejores frases de la serie (porque esta vez sí que la noche será larga y llena de horrores). Los Dothraki son los primeros en caer, en una escena de luciérnagas que se apagan, seguida por intentos inútiles de detener a los muertos, donde vemos caer a varios de nuestros extras más queridos y algún que otro personaje importante.

Finalmente el horror llega tras los muros y los intentos de vencer se convierten en intentos de sobrevivir cuando las puertas de Winterfell caen. Ahí llega un momento épico: la muerte de Lyanna Mormont, cargándose un gigante ella solita y recordándonos esa frase que marcó una vida llena de lucha y feminismo «no pienso tejer junto al fuego mientras los hombres luchan por mí«. Gracias querida.

Después sólo nos queda muerte y más muerte. Sangre, fuego y nuestros personajes favoritos a punto de morir cada dos segundos… Con dragones peleando en el cielo y montañas de muertos vivientes.

Para rematar, Jon Snow, (alias «el pesado más pesado de los siete reinos») hace que nuestro enemigo y perreador profesional se enfade y levante a los caídos llenando las catacumbas donde se esconden Sansa, Tyrion y varios personajes más de familiares stark muertos convertidos en caminantes.

Daenerys rescata a Jon. Pero, en el camino de lograr que el pesado sse pueda ir a (spoiler: inútilmente) ayudar a Bran, acaba cayendo de su dragón y quedándose sola ante una marea de muertos… (Draka… qué?) Para, menos mal, ser rescatada por Jorah, el cual acaba dando su vida para salvar a su amada.

Mientras tanto, Arya lucha y huye provocándonos varios momentos de angustia por ver al mejor personaje de esta historia a punto de morir… El Perro y Beric Dondarrion la ayudan a huir, dándonos la poética muerte del que nunca muere acompañado de la frase que nos irá marcando lo que serán los últimos minutos de metraje:

«El señor de la luz le trajo de vuelta por un motivo, este era su cometido»

Eso le dice Melisandre a Arya. Ésta recuerda y entonces aquí sabemos que el pescado está vendido: «cerrarás ojos marrones, ojos verdes y ojos…. azules«.

Y aquí llega otra frase épica de Melisandre (querida, te echábamos de menos ) a Arya: «¿Qué le decimos al Rey de la muerte?«. A lo que nuestra fucking amazing diosa-icónica responde: «NOT TODAY«.

Así que, si aquí no tenías idea de que Arya iba a salvar el día, amore… toma más ubicaína 😉

Con todos a punto de morir, los últimos minutos nos rompen el corazón y nos tienen en tensión total. El Rey de la Noche está a pocos metros de Bran, Theon se enfrenta al malo más malo del mundo, muriéndose y expiando sus pecados, no sin que antes Bran le diga una frase que nos hace llorar «Theon, eres un buen hombre… gracias» .

Mientras, Jon no puede hacer nada; el dragón del rey de la noche lo tiene atrapado; Daenerys está a punto de morir; Sansa y Tyrion están a punto de morir; las «hermanas Olsen» (Brienne y Jamie) están a punto de morir…. Todo el mundo está a punto de morir y ni siquiera el fuego del dragón de Dany puede con El Rey de la Noche…

Y aquí ya tenemos confirmado lo que nos habían ido desgranando cada temporada: el rey de la noche es un Targaryen. Porque monta dragones, hace el logo de la familia con gente muerta, no arde… etc, etc, etc.

Y entonces llega el clímax:

El rey de la noche se prepara para matar a Bran, va a tomar su espada cuando, entre miradas intensas, ocurre la promesa de Azor Ahai («el príncipe prometido que pondrá fin a la larga noche»)… Sólo que no es un príncipe: ¡es ARYA STARK! l

Arya logra lanzarse a por el rey de la noche, este la atrapa del cuello, y entonces en un escena tan épica como absolutamente breathtaking: Arya lanza su puñal a su otra mano, puñal que es el mismo con el que intentaron matar a Bran y que este recibió a manos de Meñique para luego regalárselo a Arya en este mismo sitio y lugar… Y (joder, joder) se lo clava al rey de la noche, con lo que: «Hasta luego, Maricarmen».

Arya pone fin a la larga noche dejándonos al borde del desmayo para después ver una escena preciosa. La de la llegada del alba y la muerte de nuestra querida Melisandre, cuya misión era ayudar a que la promesa/profecía de Azor Ahai se cumpliera.

Ahora queda la batalla final tras todas las bajas… la batalla contra Cersei.

Los muertos

Game of Thrones | Season 8 Episode 4 | Preview (HBO)

Así quedan las bajas (y menos mal) de esta batalla que se parece más a una película de terror que al cine bélico: Edd el Penas, Lyanna Mormont, Beric Dondarrion, Theon Greyjoy, Jorah Mormont, Melisandre de Asshai, El Rey de la Noche.

Y no, el otro dragón de Dany (como la llama Jon) sigue vivo por lo que hemos podido ver en el adelanto del próximo episodio.