EVITAR LA PIEL SECA EN INVIERNO
Con la llegada de las bajas temperaturas la piel se vuelve más seca y se ve más apagada, llegándose también incluso a irritar.
Esto se debe a que esta recibe menos oxígeno, pues la circulación de la sangre en la piel disminuye por el frío.
Además, cuanto más fina es la piel más riesgo tiene de secarse, porque los capilares están más expuestos y, por eso, sufre más los cambios de temperatura y el frío del invierno. Por esto es tan importante aportar a la piel la hidratación y protección necesaria para que no llegue a secarse y las consecuencias que ello conlleva.
Por la mañana hidrata la piel y el rostro a diario
Es básico preparar la piel antes de exponerla a las bajas temperaturas ya que el frío provoca que el oxígeno en la piel disminuya, llegando a crear grietas en la piel. Será esencial utilizar una crema rica que ofrezca activos hidratantes y repare la barrera cutánea de la piel para reforzar.
Todas las noches es el momento perfecto para la regeneración de la piel
La noche es el momento perfecto para ayudar a la piel a la regeneración. Para ello, habrá que limpiar el rostro con un limpiador suave, como un aceite o leche limpiadora que no irrite la piel, evitando por completo los exfoliantes o tónicos que contienen alcohol. Por otro lado, habrá que reparar la barrera cutánea de la piel, aportándole hidratación al rostro y mantener así el agua de la piel.